Tal como hicimos cuando comentamos la tercera entrega de “La Caja” (Exactamente por acá: https://www.facebook.com/Historiasenvinetas/posts/p...

Familia pandémica: “El pequeño Timy”

Tal como hicimos cuando comentamos la tercera entrega de “La Caja” (Exactamente por acá: https://www.facebook.com/Historiasenvinetas/posts/pfbid0iiztSsXqz6oYxVA7PY28iA1Uo6Lz6cEzggxPC66suVSt3D5YAYUjLCVLEMHt5m7Ml), vamos a volver a los tiempos pandémicos para iluminarlos gracias a la magia de la Historieta. Porque en aquellos aciagos días de cruel encierro, el historietista Hor Lang (Horacio Langois) empezó a dedicarle algunas de sus horas a realizar una tira que compartía en redes sociales y, rápidamente, nos enganchó a muchos de nosotros, quienes quedábamos sedientos por la próxima aparición de esta familia singular.

Tuvo tan buena repercusión que, a finales del 2021, Historieteca Editorial recopiló las páginas existentes y las publicó bajo el nombre “El pequeño Timy”, libro que adquirimos recientemente para nuestro deleite.

 


En plena locura pandémica, una familia tipo empieza a sobrellevar la nueva realidad lo mejor que puede. Matrimonio y dos hijos, la mayor es la pequeña Jeny y el gurrumín de la casa es el pequeño Timy. Cada uno de ellos se adapta a la cuarentena a su manera, mientras la madre y Jeny son algo descreídas y relajadas, el padre ha modificado totalmente su actitud ante la actualidad y vive completamente tenso, perseguido por el miedo y tomando decisiones extremas para protegerse, y el pequeño Timy es un verdadero hincha pelotas, que ama con locura a su padre, que es extremadamente dulce e inocente y que funciona como válvula de escape para que el padre de familia expíe sus temores. Cualquier situación que se presente termina con Timy castigado, golpeado, abandonado, reemplazado o asesinado salvajemente. Pero, gracias a la magia de las viñetas, vuelve a estar intacto al comienzo de la siguiente historia. En este marco la familia vive varias aventuras epidemiológicas relacionados con el covid, se reúnen ante la tele esperando las nuevas cifras de muertos, somatizan síntomas, se pelean por salir o no salir a la calle, llevan las medidas de seguridad e higiene a la locura, se adaptan a la virtualidad, esperan las vacunas salvadoras, etc.

Todos estos temas se mezclan con cualquier otra cosa que se le ocurra al autor, política, programas de tele, cultura popular, video juegos, Historietas o redes sociales entre otros, al tiempo que el elenco se extiende con apariciones ocasionales de personajes célebres como Cris Morena, Cavallo, los simuladores o John McClane y algunos otros bastante más recurrentes como el Chuavechito (Niño que sponsoreaba al suavizante de ropa “Vívere” y que es notablemente parecido al pequeño Timy), o el plomero, cuya apariencia también se asemeja a la de Timy, es muy querido por la madre de familia y cada visita suya emociona a los chicos, mientras que el padre no se entera del estrecho vínculo que mantiene con su esposa.




Hor Lang saca lo mejor de su humor en esta Historieta, con mucha sátira, crítica social, mala leche, sarcasmo, gore y explota al máximo la paranoia que se generó con la pandemia en su momento, exponiendo en estas páginas todos los perfiles que se mostraban en aquellos días, con los que seguían las normas al pie de la letra, los que se oponían, los conspiranoides que creían que todo era un plan de erradicación y/o dominación global, los pro vacunas, los anti vacunas y todo lo demás. Leerlo en su momento, cuando lo compartía en redes, fue sensacional, pero es más divertido leerlo todo junto en libro (Y cuando ya dejamos atrás el encierro, claro), porque cada tanto metía una “saga larga” como “La saga de Windows XP”, o “La saga del Timy impostor” que se disfrutan más al leerla de un tirón.

El dibujo es una mezcla de estilos, elegidos a conciencia por el autor haciendo gala de su versatilidad, mezclando comic mainstream yanqui de los 60’s, algo de manga de terror, humor gráfico y caricaturas creando un combo que hace funcionar perfecto al mundo de Timy y resulta tan divertido como recomendable es este libro (O sea, mucho…).


 

“¡Ahh, otra vez a aislarse! Ahora sí voy a hacer mi historieta contando mis experiencias de cuarentena. Qué lindo todo!.”

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