El libro en cuestión es obra de Hernán Casciari y el Maestro Horacio Altuna, quienes durante un tiempo coincidieron en Barcelona y tuvieron encuentros regulares en los que empezaron a elucubrar las historias que se reúnen aquí. Entre ambos tiraban ideas sobre las que luego Casciari desarrollaba el guion al que más tarde daría imágenes Altuna.
El calor es la temática que intentan que esté presente de alguna forma en todas las historietas, puede ser el calor ambiental o corporal, literal o metafórico, producto de un enojo o de una calentura… Así podemos ver como es recibida una hermosa joven citadina en un pueblo varado en el tiempo, de que modo una esposa que intenta avivar el fuego en su matrimonio descubre las infidelidades de su marido, porque la rutina de las vacaciones puedes ser más agobiante para un padre de familia que el año laboral, los románticos encuentros anuales de dos jóvenes en el mismo balneario, las ventajas de la tecnología a la hora de levantar minas en la playa, entre otras situaciones…
Todas las historietas tienen el mismo formato, se narran con 3 viñetas panorámicas por página acompañadas por un texto en el margen izquierdo de cada viñeta. La relación entre el texto y las viñetas funciona de distinta manera según la historieta, puede complementar lo que se ve, puede dar trasfondo de qué es lo que impulsa el accionar del personaje, puede ser la voz en off de algún observador de la historia, ser el pensamiento del protagonista, o bien, ir por caminos aparentemente distintos a los de la narración gráfica…
Por lo que pude averiguar, esta es la primera incursión de Casciari en historieta. Sus obras anteriores son novelas o libros de cuentos, pero el encuentro con Altuna lo alienta a meterse entre viñetas. Tal vez por conocer los gustos del dibujante, por acuerdo entre ambos o por coincidencia en sus intereses, todas las historias son de corte costumbrista, sin ninguna intervención de elementos fantásticos. A pesar de que dio notables muestras de trabajar con solvencia historietas de ciencia ficción o fantásticas, es en las historias costumbristas donde Altuna realizó sus páginas más recordadas (Con perdón de las eróticas, claro está). Todas las historias planteadas por Casciari son llevaderas e interesantes, aunque varias de ellas terminan con un remate humorístico que, a mi particularmente, me resultó un poco obvio y nada gracioso en la mayoría de los casos. Pero obviando el remate, las historias funcionan sin ser un derroche de originalidad y buscan la manera de que Altuna se luzca dibujando sus hermosas damas.
Por su parte, Altuna mantiene el buen nivel que suele exhibir siempre, prodigándose con sus mencionadas y hermosas mujeres. Tal vez el detalle en los fondos no tiene el mismo nivel que el obtenido en obras como “Charlie Moon” o “Las puertitas del Señor López”, pero, gracias a la calidad del libro, se disfruta mucho el buen hacer que tiene con el color, trabajo que se pierde en la tira diaria que se publica en el matutino local, por la pobre calidad de reproducción…
Obra recomendada para leer antes de las vacaciones o bien, como en este caso, para recuperar un poco el calor del verano que se fue…
“Únicamente durante las vacaciones. Solo una vez al año. Nuestra relación no interfería en los matrimonios.”
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