En el año 2017 la editorial Loco Rabia publico “Barrio Western” de Téhem (Thierry Maunier), obra publicada originalmente en 2010. Téhem naci...

Reunión en la isla: “Barrio Western”

En el año 2017 la editorial Loco Rabia publico “Barrio Western” de Téhem (Thierry Maunier), obra publicada originalmente en 2010. Téhem nació en 1969 en los suburbios parisinos, pero a los 5 años se muda a La Isla de la Reunión donde vivió su infancia y parte de su adolescencia. La Isla de la Reunión es, como su nombre lo indica, una isla que se ubica al sur de África, cerca de Madagascar y es parte de los distintos “Departamentos de Ultramar” que pertenecen a Francia, país que tiene en su historia un marcado expansionismo territorial y varias colonias por el mundo… De lo vivido allí, Téhem toma inspiración (Mezclada con algunos recuerdos propios) para llevar adelante esta genial obra que es redonda por donde se la mire!

La historia, que cuenta con un prólogo y cuatro capítulos, está protagonizada enteramente por animales antropomorfos y se desarrolla en un día de septiembre de 1976 en St. Dennis, capital de la Isla de la Reunión. El prologo transcurre en el negocio de ramos generales de Sergio Ha-Fok, donde se sirven tragos y se venden alimentos, indumentaria, herramientas, etc. El local está ubicado en una amplia esquina y tiene ingreso por distintas puertas laterales. En la barra, bebiendo ron y bastante borracho, se encuentra Turpin con un maletín entre las piernas, quien le cuenta a Ha-Fok su encuentro con un “Fantasma pirata”. Dos niños, Teobaldo y Gerardo, llegan a una de las puertas del local. Uno de ellos ingresa a comprar pan y jugo, mientras que el otro se queda afuera mirando la moto de Ángelo, quien acaba de llegar y, al ver a Celina entrando al local por la otra puerta, la piropea y la persigue. Ángelo alcanza a Celina dentro del negocio y comienza a manosearla, ella se resiste y lo golpea. Ángelo se enoja, le devuelve los golpes y la tira al suelo. Turpin abre su maletín y de él saca un revolver con el que apunta al agresor y lo obliga a detenerse. Gerardo se fascina con el arma, pero Ha-Fok se apura a despacharlo para que salga del local. Ha-Fok es, además de tendero, un aficionado a la fotografía. Para calmar la tensión, toma su cámara y les pide a todos que posen para una foto. Toma una instantánea de cada uno y también de los niños que, al ver la cámara, se acercan para posar. Fin del prólogo.
En los capítulos siguientes, veremos el día que tuvo de cada uno de los personajes presentados en la escena anterior, como llegó a la tienda de Ha-Fok y que le sucedió al salir. Así, en el primero seguimos a los niños a su clase de catequesis, en el segundo vemos a Ángelo tratar de salir indemne de un robo y un asesinato, en el tercero la lucha de Turpin por conseguir trabajo y llevar dinero al hogar y, en el cuarto y último, vemos el desenlace donde todas las historias se chocan entre sí.



Todas las líneas argumentales están interconectadas y se van tocando todo el tiempo. Una escena que nos parece incompleta siguiendo a los niños, es revisitada más adelante desde la visión de otro personaje y la terminamos de entender. Esto se da todo el tiempo y con todas las historias. El guion es un complejo rompecabezas, perfectamente diagramado. El trabajo del autor en este punto es excelente, no queda nada librado al azar, todo esta planificado al detalle y ejecutado extraordinariamente.
Con estas historias, Téhem nos muestra la sociedad de los años 70´s en la isla. Vemos crimen, desigualdad social, abuso de menores, un racismo feroz, el terror que impone la religión como forma de educación, la intolerancia al credo distinto, corrupción, contrabando de drogas, etc. Es tan crudo todo que, asumo yo, debe ser este el motivo por el que eligió contar la historia con animales en lugar de personas, buscando suavizar un poco el impacto que esto puede provocar. Pero a pesar de todo lo mencionado, la historia no es densa ni grave, al contrario, está narrada de manera muy ligera y con varios momentos de humor.



El dibujo también es una maravilla. Todo en blanco, negro y grises con un logrado trabajo en lo expresivo, en los escenarios, en la ambientación temporal y con puestas en página diversas pero todas efectivas. Si bien todo es muy bueno, lo que más me gustó fue el diseño de los personajes y la elección del animal de cada uno, muy ligada la personalidad que tiene el personaje con el animal elegido (Perro y cerdo particularmente).
Un trabajo muy interesante, bien planeado, llevado a cabo de manera eficiente, con una muy buena historia que me dejo con ganas de leer más cosas de este autor a quien no conocía previamente. Altamente recomendable.



Como también es recomendable esta edición nacional y popular de Loco Rabia con las condiciones a las que nos tienen acostumbrados, tamaño reducido (Tipo Ovni Press), tapa blanda con solapas y buena calidad de papel y encuadernación. Lo malo que tiene esta edición es que se olvidaron de traducir una página, la que quedo enteramente en francés… Para subsanarlo, incluyeron en todas las copias de la presente edición una fotocopia de dicha página suelta y traducida… Alguien se habrá quedado sin trabajo por eso… Como sea, ojala les vaya bien y puedan publicar más material europeo de este estilo.



- “¡Sin cuerpo no hay crimen! Si no quieres ir a la cárcel, ¡Ayudame a cavar!”

0 coment�rios: