A la mencionada “Muerte de Superman” le sigue el “Adventures of Superman #500” (Un especial que en español se conoció como “El regreso de Superman”), donde Jonathan Kent, que salía de un estado de coma después de haber estado a las puertas de la muerte, volvía en sí convencido de haber traído consigo el alma de su hijo. Acto seguido, en cada una de las cuatro colecciones que tenía Superman en ese momento, aparece un nuevo Superhombre afirmando ser el verdadero Superman.
En Action Comics #687, con guiones de Roger Stern y dibujos de Jackson Guice, vemos el nacimiento del Erradicador, un ser de energía que, en teoría, habita el cuerpo de Kal-El, el cual rescató de la tumba. Conocido también como “El último hijo de Krypton”, el Erradicador usa unas gafas para proteger sus sensibles ojos de la luz y es extremadamente violento a la hora de entrar en acción, pero luce exactamente igual a Kal-El.
Superman: the man of steel #22 tiene guiones de Louise Simonson y dibujos de Jon Bogdanove. La dupla introduce a John Henry Irons, un ex diseñador de armas que se sorprende al ver sus prototipos en manos de distintas bandas criminales que operan en su barriada de Metrópolis. Decide hacer algo al respecto, por lo que se diseña una armadura y, para homenajear a Superman, se pone una “S” de metal en el pecho y una capa roja.
Dan Jurgens & Brett Breeding se encargan del título “Superman”, que en el número 78 presenta a “El Hombre del mañana”, un Superman Cyborg que aduce que las heridas que le causó la batalla con Doomsday lo obligó a reemplazar partes de su cuerpo con piezas robóticas. A pesar del frio aspecto que le da su parte mecánica, el parecido con Superman es innegable.
Por último, la maravilla de Metrópolis hace su debut en “Adventures of Superman #501” de la mano de los guiones de Karl Kesel y los dibujos de Tom Grummet. Superboy escapó del proyecto Cádmus y afirma ser el clon de Superman, aunque manifiesta algunos poderes distintos a los del Kryptoniano.
Durante los primeros números, cada título se mantiene bastante independiente del resto desarrollando a estos nuevos personajes y su entorno. Lois Lane se entrevista con todos ellos buscando descifrar si verdaderamente alguno es Clark resucitado. Pero la inminente amenaza que supone la llegada del Mundoguerra de Mogul a la Tierra comienza a reunir a los nuevos Superhombres. Mongul destruye completamente Coast City, la ciudad de Hal Jordan y de a poco los héroes empiezan a confluir en sus restos. Se revela entonces que el Superman Cyborg era en realidad el supuestamente fallecido Hank Henshaw (Un astronauta que había hecho su debut en “Adventues of Superman #466, un número homenaje a los Fantastic Four, y todos pensábamos que jamás volvería), quien culpaba a Superman de su infortunio. Hank era el amo de Mongul y el villano tras la invasión a la Tierra. Su plan era replicar lo que habían hecho a Coast City en otras ciudades de la Tierra y terraformar el planeta en un nuevo Mundoguerra.
También nos enteramos de que El Erradicador no era otra cosa que el artefacto kryptoniano y milenario llamado igual (Poco misterio allí…), que había llegado a manos de Superman durante su exilio en el espacio y que tantos problemas le había traído. Este aparato había dejado el verdadero cuerpo de Superman en una matriz krytoniana en la fortaleza de la soledad, cuyos líquidos lo nutrieron y le permitieron volver a la vida, aunque sin poderes.
Con el renacimiento del héroe consumado, Superman, Steel, Supergirl, Superboy y Green Lantern se lanzan al enfrentamiento final contra el Superman Cyborg, Mongul y todo Mundoguerra!!!
Había pasado bastante tiempo desde la última vez que leí estos números y el recuerdo que tenía era el de una historia pausada en la que los hechos se iban dando lentamente, con un detenimiento mayor en cada etapa (Ya sabemos que el recuerdo es una construcción de la mente y a veces nos traiciona…). Pero la verdad es que va a los palos de principio a fin y todo es bastante precipitado, o al menos esa fue la sensación que me dio. Lo que sucede es que son muchos personajes y situaciones las que tienen lugar en la saga, una saga que se desarrolla a lo largo de 20 comicbooks, y eso la impregna de un vértigo asombroso. A pesar de estas consideraciones, disfruté muchísimo de releer estos números a los que les tengo un amor infinito, por lo que me es imposible emitir un juicio imparcial (Como en todos los casos, por cierto, pero aquí se nota más…). Todos los equipos creativos tienen un buen nivel, tanto en los guiones como en los dibujos, tal vez afloja un poco para esta altura el Maestro Jon Bogdanove, cuyos números parecen bastante abocetados, aunque con la fuerza y el dinamismo de siempre. Los demás están con la vara alta, Jurgens se siente en casa cuando dibuja Superman, Guice es enormemente talentoso y Grummett comienza en estos números un vínculo con Superboy que se extendería por años con buenos resultados.
Al igual que en “La muerte de Superman”, toda la saga está excelentemente coordinada y casi no presenta fisuras de número a número, a pesar de tener tal cantidad de artistas involucrados. Muy probablemente esto sea mérito del trabajo que hizo Mike Carlin, que era el editor en ese momento de los títulos del Hombre de Acero.
Toda esta saga es muy entretenida en sí misma, viene del sacudón que significó la muerte de Superman y, por si esto fuera poco, de acá se desprende todo el arco “Crepúsculo Esmeralda”, donde Hal Jordan pierde la chaveta y mata a todos lo Green Lantern Corps antes de convertirse en Parallax. Y además, toda la saga Muerte-Reino-Regreso, impulsó un reverdecer en los títulos de Superman que tuvieron algunos buenos años por delante… (Menos lo del Superman eléctrico…)
Por supuesto, si usted está interesado en leer esta saga, querido lector, no es necesario que haga arqueología para conseguir estos vetustos tomos de Vid que acabamos de comentar. Ha sido reeditada infinidad de veces y recientemente tuvo una coqueta edición local de la mano de Ovni Press… Así que Up, Up and Away!!!!
“Lo último que recuerdo, es que Doomsday me golpeaba. Soy yo, Lois. Mírame a los ojos. Recuerda que no importa lo que pase… ¡Siempre te amaré!”
Gran reseña Batichueco. En mi caso en su momento el Funeral y Reinado lo fui leyendo de prestado de a pedazos, también de Vid (tenía un amigo que seguia comprando, yo postPerfil casi nada). Estaba como muy exigente, todo lo comparaba con lo visto en Perfil o Zinco y me parecía una porquería...muuuchos años después la leí enterita, y es una gran saga, muy bien coordinada, superépica. Con Bognadove ya lo dije otras veces, desde el tomo de la Muerte que no lo tragaba, a los demás si. Pero lo comparo con los horrrores novenchotos que yo no llegué ni a ver entonces, y es Rafael. Si extrañé siempre que no hubiera algo de conexión con la mitología previa, como Luthor o Brainiac, era la época de "todo nuevo". Creo que por eso lo que más me gustó de todo es Cazador/Presa, donde al menos todo se conecta con Krypton y Apokolyps.
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